Aceite de inmersión tipo A Jalmek
(Según Cargille; índice de refracción 1.5150)
El Aceite de Inmersión Tipo A de la marca JALMEK es un líquido transparente y de alta calidad, diseñado específicamente para mejorar la resolución y la claridad de las imágenes en la microscopía de luz. Este producto sigue las especificaciones del estándar de la industria, Cargille, Tipo A, lo que garantiza su fiabilidad en aplicaciones de laboratorio.
Descripción y Propiedades Ópticas
El aceite de inmersión se utiliza para llenar el espacio entre la muestra y la lente del objetivo del microscopio. Al hacerlo, evita la refracción (desviación) de la luz que ocurre cuando la luz pasa del vidrio del portaobjetos al aire y luego a la lente del objetivo. Su propiedad más crítica es su índice de refracción, que en este producto es de 1.5150, un valor que coincide con el índice de refracción de la mayoría de los vidrios utilizados en portaobjetos y cubreobjetos.
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Índice de refracción (): 1.5150 ± 0.0002
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Apariencia: Líquido transparente, incoloro y de consistencia viscosa.
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Viscosidad: Su viscosidad adecuada permite que el aceite permanezca en su lugar sin escurrirse.
Usos y Aplicaciones
El aceite de inmersión es un componente esencial en la microscopía de alta potencia, especialmente con objetivos de 100x. Se utiliza para:
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Aumentar la Resolución: Al eliminar la dispersión de la luz, el aceite de inmersión permite que más rayos de luz entren en el objetivo. Esto reduce las aberraciones ópticas y aumenta la resolución, permitiendo al usuario ver detalles más finos en la muestra.
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Mejorar el Contraste y la Brillantez: Un mayor número de rayos de luz que llegan al objetivo resulta en una imagen más brillante y con mejor contraste.
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Análisis Microscópico: Indispensable en microbiología para la visualización de bacterias, en citología para el examen de células y en hematología para el análisis de frotis sanguíneos.
Almacenamiento y Consideraciones
El aceite de inmersión debe almacenarse en un recipiente hermético para evitar la contaminación con polvo, fibras u otras partículas que podrían afectar su rendimiento óptico. Se recomienda mantenerlo a temperatura ambiente y lejos de la luz directa del sol. La limpieza del objetivo y del portaobjetos después de su uso es crucial para evitar la acumulación de residuos. Para la limpieza, se pueden usar paños especiales para lentes o papel de lente y un solvente como xileno o alcohol.